Gracias a los avances tecnológicos y a la creación de equipos globales, cada vez más empresas están adoptando esquemas laborales flexibles
Los esquemas rígidos de horarios laborales se están quedando en el pasado. Hoy en día, muchas organizaciones han llegado a la conclusión de que el rendimiento basado en metas alcanzadas y no en horas frente a un escritorio resulta beneficioso no solamente para la organización, sino también para sus colaboradores.
Un horario laboral flexible es actualmente una prestación laboral que ha ganado popularidad (incluso más que incentivos económicos) ya que permite que las personas organicen sus tiempos como crean conveniente y facilita crear un balance entre las obligaciones laborales y los compromisos personales.
Algunos de los beneficios de esta popular práctica son:
- Ahorra recursos en las oficinas
- Aporta a la satisfacción y motivación de los colaboradores, y por ende su rendimiento y productividad.
- Reduce los niveles de absentismo
- Por ser un incentivo muy deseado, hace que la organización destaque al atraer talento.
Para poder aprovechar al máximo los beneficios de esta práctica, es necesario contar con un reglamento y políticas claras entre todos los involucrados, además de trabajar bajo objetivos y metas precisos y fomentar la comunicación en todo momento, con el fin de no afectar el trabajo de los demás.